0 Por la ruta del turismo funerario en Cuba
- Turismo
- por Lisandra Leyé del Toro
- 29-01-2019
Puede que no sea una de las modalidades de turismo que más adeptos encuentra, pero también el turismo funerario tiene sus seguidores en todas partes del mundo. Los cementerios de Colón en La Habana y Santa Ifigenia en Santiago de Cuba, se destacan con predilección entre los turistas provenientes de Alemania, Francia y España. Algunos viajeros buscan en ellos, conocer más sobre la nacionalidad cubana.
Cuba es un país tan rico en su cultura y sus tradiciones, que en los últimos años se ha potenciado el arribo de viajeros que vienen en busca de nuestras esencias, con lo cual esto influye notablemente en los diversos gustos de los foráneos, principalmente europeos interesados en conocer el arte funerario de la Mayor de las Antillas.
Muchas personas, viajan a los distintos cementerios del mundo, para conocer los sepulcros de celebridades y apreciar las esculturas que guardan restos de personas valiosas, tanto para el arte como la política. Ese es el caso del desarrollo de esta especialidad dentro del turismo cultural cubano. Los camposantos de este país seducen a un segmento específico de viajeros, quienes eligen además a esos sitios para ampliar sus conocimientos sobre nuestra nacionalidad.
En la capital existen 21 cementerios, pero el que llama la atención de los viajeros y goza de gran preferencia es la Necrópolis de Cristóbal Colón o como comúnmente se le llama, «el Cementerio de Colón». Otros dentro del territorio nacional que ganan adeptos son los cementerios Tomás Acea y Reina, en la central provincia de Cienfuegos; y Santa Ifigenia, en la oriental ciudad de Santiago de Cuba. Pero sólo Colón y Santi Ifigenia son los que cuentan con recorridos turísticos, con predilección en viajeros provenientes de Alemania, Francia y España.
¿Pero qué se puede encontrar de atractivos en estos lugares?
Algunos extranjeros buscan fundamentalmente el excelente estado de conservación de mausoleos y esculturas, y la historia acumulada en esos escenarios.
En la capital cubana existe el programa Ruta y Andares de la Oficina del Historiador de la Ciudad, que incluye un recorrido por el interior de la Necrópolis de Colón, es, sin dudas, un lugar muy interesante, además de por su historia por las esculturas y obras de arte que atesora. En la Ciudad de La Habana existen 21 cementerios, entre los que sobresale el de Colón ubicado en la esquina de Calzada de Zapata y Calle 12, en el barrio de El Vedado. Por demás, no solo es el más importante cementerio capitalino, sino de toda Cuba, y está catalogado entre los más extensos del mundo.
En él se conserva una gran cantidad de obras escultóricas y arquitectónicas, motivos por lo que algunos expertos lo consideran como el tercero del orbe, antecedido por el de Génova en Italia y uno de Barcelona, España. Su construcción se comenzó el 30 de octubre de 1871, y concluyó 15 años después, el 2 de julio de 1886. El arco de entrada es impresionante con un conjunto escultórico en su punto más alto preparado en mármol de Carrara, de 34 metros de longitud por 21,66 metros de altura toda la portada. Ese conjunto representa las virtudes teologales: fe, esperanza y caridad, y fue obra del arquitecto español Calixto de Loira, mientras los relieves de las esculturas en mármol son del cubano José Villalta de Saavedra.
Esta ciudad funeraria tiene 560 mil metros cuadrados donde se combinan estilos como el ecléctico, románico, gótico, griego, egipcio, militar, renacentista, neoclásico, art nouveau, art deco, racionalista y moderno. Es increíble esta fusión de estilos y el empleo de los más variados materiales y ornamentos en rejas, cancelas, balaustradas, vitrales, columnas, y cruces de diferentes religiones.
Se emplearon, además, materiales como mármol de Carrara, granito, piedra, maderas preciosas, y bronce, en querubines alados y hasta reproducciones fotográficas en superficies de porcelana. La portada de estilo bizantino da paso a dos amplias avenidas nombradas de norte a sur Cristóbal Colón y Obispo de Espada, y de este a oeste Fray Jacinto, marcador principal. Calles, manzanas y lotes componen esta ciudad mortuoria. Los especialistas lo consideran un verdadero monumento arquitectónico de la antigüedad, además de ser el único cementerio americano dedicado al gran navegante genovés.
Entre las construcciones más remarcables está el conjunto dedicado a un grupo de bomberos muertos en 1890, de 10 metros de alto, obra del escultor español Agustín Querol. Y entre los mitos aparece la tumba de Amelia Goire de la Hoz, dama de alta sociedad, conocida como «La Milagrosa», a donde acuden peregrinos en busca de algún beneficio espiritual o físico. El mito parte del hecho que luego de varios años enterrada, su cuerpo permaneció intacto al abrir el ataúd. Patriotas, militares, políticos y héroes comparten espacios de alguna manera. Es un lugar que atrae sin dudas miradas, entre los amantes de la arquitectura y las esculturas.
El cementerio Santa Ifigenia, es el más antiguo de esta isla. En la actualidad es de parada obligada para centenares de viajeros del mundo. Ubicado en el oriente cubano, en la provincia de Santiago de Cuba, es una especie de lugar de peregrinación, primero para los lugareños y en la actualidad para muchos extranjeros pues allí está el Mausoleo a Martí, reconocido como el más universal de los cubanos.
Inaugurado el 28 de abril de 1868 en la actualidad cuenta con más de 140 años, y en su parte original se encuentra la tumba más antigua, la de la familia Navarro, que data del 25 de abril de 1868. Sin embargo, un impacto fundamental puede estar en que en el lugar descansan 32 generales de las guerras de independencia de este país, de los que 28 fueron orientales. Los restantes que menciona son Ramón Leocadio Bonachea de Sancti Spíritus, Matías Vegas Alemán, de Islas Canarias, España, o el general canadiense William O´Ryan, cuya tumba está muy cerca de Perucho Figueredo, el creador del Himno Nacional. Refiere también a los generales José Maceo, Rafael Maceo, Guillermo Moncada, Flor Crombet, Luis Martí y Silverio del Prado, una constelación de héroes de esas guerras. El mausoleo más importante está dedicado a José Martí (La Habana 1853- Dos Ríos, Oriente.1895) que descansó junto a los veteranos desde 1947 hasta 1951, cuando el 30 de junio se inaugura el actual sepulcro, el más relevante de todo el cementerio, y de Cuba.
La parte vieja del cementerio es de tumbas cerradas a la perpetuidad, pues funciona como museo al aire libre, y después de un parque divisor es que están las tumbas estatales. Todo es patrimonio histórico cultural de la ciudad de Santiago de Cuba. En este camposanto está el mayor por ciento de los mártires de este país.
Este también es el cementerio de la música y los artistas, con su Sendero de los trovadores con los restos de Pepe Sánchez creador del son, y muchos célebres, entre ellos Francisco Repilado conocido internacionalmente como Compay II, quien junto al Buena Vista Social Club recorrió el mundo. Y lo curioso de la tumba de Compa II es que sus restos descansan sobre arena de la playa Siboney, la más popular de la ciudad santiaguera, de donde son sus orígenes. En su lápida está el nombre de su última canción, Las flores de la vida, su guitarra y sombrero, en bronce.
El turismo funerario pudiera ser una opción atractiva y de una gran riqueza cultural, si está de paso por esta isla tropical.